Tiempo de Regalos
Estamos en tiempos de regalos. Buscamos objetos y situaciones especiales para regalar en estas fiestas y también para regalarnos a nosotras mismas porque nos lo merecemos. Unos regalos muy especiales son aquellos que tienen que ver con el placer, son regalos que nos llegan a lo más íntimo y nos conmueven: son los juguetes sexuales que sirven para obtener y aumentar el placer en nuestras relaciones sexuales, ya sea de forma individual o compartida. Los podemos utilizar en cualquier momento de la respuesta sexual y para distintos fines y efectos. Cuando pensamos en ellos, los vemos y los elegimos aumentan nuestro deseo y amplifican la excitación, lo que en sí mismo aumenta la intensidad de nuestro placer.
Los juguetes sexuales se emplean desde siempre: en el neolítico ya se recurría a figuras de Venus como consoladores. Existen pinturas y frescos donde se puede ver a la mujer utilizándolos en Mesopotamia, Egipto, Roma… En la época victoriana se empleaban para prevenir la histeria femenina.
Los indígenas de la Patagonia empleaban el quesquel, hecho con mechones de crin, para aumentar el placer de la mujer durante el coito.
Posteriormente, a estos consoladores se les añadió electricidad y se convirtieron en vibradores. En España, en las épocas en que todo lo que tuviera que ver con el placer era malo, se vendían vibradores como masajeadores faciales y se vendían por correo.
Juguetes preferidos por las mujeres
Actualmente los juguetes sexuales están de moda y cada vez más mujeres nos acercamos a una tienda erótica o vemos y compramos por internet. Una forma divertida de adquirirlos, e informarse sobre su uso, son los tapersex. Dicen la estadísticas que un tercio de las mujeres los usan.
Vibradores: son los más demandados y tienen como fin la masturbación.
También podemos encontrarlos como anillos, que se ponen en el pene y estimulan el clítoris durante el coito, o en dedos. Como podéis observar algunos llevan un pequeño apéndice para estimular el clítoris externo mientras dentro de la vagina estimulan el interno.
Otra cosa que se suele comprar en estas tiendas es la lencería erótica. Algunas de estas prendas son comestibles.
Y también geles y cremas que producen frío y calor para aumentar las sensaciones.
Juguetes preferidos por los hombres
Los preservativos con sabores son especiales para la práctica del sexo oral y también suelen comprar aquellos con formas divertidas y que presentan zonas rugosas o con púas (de silicona o goma) para aumentar el placer.
Aunque desde siempre se ha considerado a los hombres como grandes consumidores de sexo y activos ante la experimentación sexual, los juguetes que suelen comprar o bien son para las mujeres o para compartir con estas en los juegos sexuales de pareja.
Los objetos para ellos ya no son las famosas muñecas hinchables que nos hicieron reír en las películas sino vaginas, anos, bocas y manos con vibración de silicona y que, al igual que los dildos (Vibradores que imitan en tamaño y tacto al pene) y vibradores, son de silicona muy suave que imita la piel humana. También pueden usar dildos específicos para la penetración anal.
Un juego divertido que os propongo es regalar huevos vibradores a vuestras amigas para una fiesta y luego tirar los mandos mezclados encima de la mesa. Como estos mandos tienen distintas velocidades se puede apretar según salga la tirada de unos dados. Sí es importante que nadie sepa qué mando tiene. Este juego también se puede practicar en pareja.
Felices fiestas y un abrazo muy especial y solidario para esas madres mexicanas que vieron cómo sus hijos estudiantes salían de casa y a día de hoy no saben que fue de ellos…
Ofelia López Belay es licenciada en Psicología, con dos especialidades: Clínica e Industrial. Además, es terapeuta sexual y máster en sexualidad por la Fundación Sexpol. Durante su carrera profesional ha impartido cursos y seminarios sobre sexualidad, en particular sobre sexualidad para adolescentes, personas adultas y mayores. Atiende y asesora en consulta a personas con problemas sexuales y/o de pareja, tanto de manera presencial como por vía telefónica e internet. Igualmente, trabaja en la Escuela Municipal de Salud de Móstoles, donde, además de abordar problemas relacionados con la sexualidad, imparte cursos sobre memoria, sueño, salud psicosocial de la mujer, control del estrés, habilidades sociales, drogas, comunicación y deshabituación tabáquica.